Las tapas son uno de los aspectos de la gastronomía española más conocidos. De hecho, las tapas tienen su secreto, que se ocultan detrás de ella, un modelo de gastronomía, vamos a desvelar hacia dónde señala su futuro y las claves de su triunfo.
La tapa se convirtió en un verdadero icono de la gastronomía. Un modelo de comercio asumible y que ha conseguido casos de triunfo bastante distintos, que permanecen implantándose internacionalmente.
Las tapas como negocio rentable
Gestionar exitosamente este modelo gastronómico necesita una fórmula original y, simultáneamente, económicamente posible con un plan sustentable.
Los retos para bares de tapas son semejantes internacionalmente. La mayor parte de ellos permanecen involucrados con la formación del personal a partir de la perspectiva de la cocina y el servicio.
Y es que la construcción de un ambiente exclusivo vinculado a una cantina de tapas requiere el compromiso y la motivación del personal, y esto no continuamente es sencillo de transmitir y desarrollar.
Otro desafío adicional para los bares de tapas en España —y además a grado internacional— es la ‘interconexión’ entre locales semejantes. No hablamos de abordar desafíos a nivel personal, sino de funcionar como un conjunto de barras interconectadas.
La carencia de conectividad con otros locales semejantes en las regiones típicas de ‘tapeo’ ha resultado además ser un problema universal. La solución pasa por hacer frente a los desafíos y oportunidades como una red de bares de tapas, y no como un solo local.
Las tapas internacionalmente
No es lo mismo la experiencia de tapas en España o en otro territorio de todo el mundo. Hay una secuencia de recursos habituales que definen la vivencia de tapas a nivel mundial, según los profesionales.
La calidad de los alimentos, el sabor y el ambiente del local son los 3 recursos base en una experiencia de tapas. El valor de la sociabilidad en la experiencia de las tapas se aprecia además en otros 2 componentes significativos: la buena compañía y la reacción profesional e informal del servicio.
Curiosamente, recursos clave en España como son la gratuidad de la tapa, su formato personal, o el hecho de estar expuestas en la barra del local gastronómico, no son imprescindibles en la vivencia universal.
Sin embargo, se han hecho estudios acerca de llevar las tapas más allá de las fronteras españolas.
De acuerdo a un estudio reciente hecho por una escuela de gastronomía, las oportunidades para los locales de tapas tienen la posibilidad de alterar la funcionalidad de las naciones. Con base a esto, hay 3 enfoques diferentes:
- China o USA se piensan ‘mercados receptivos’ a importar este modelo gastronómico.
- Reino Unido, Suecia o Alemania son ‘escenarios variables positivos’, debido a que no cuentan con enorme vivencia basada en modelos de esta clase, empero no obstante permanecen adaptando paulatinamente sus prácticas gastronómicas.
- Finalmente, hay ‘mercados no abiertos’. Este conjunto se conforma por las naciones en las cuales el compartir el término de las tapas no es parte de la cultura o no está asociado a los productos gourmet.
Cómo vemos el mundo de las tapas va más allá de un bocado para compartir unas copas. Existe todo un movimiento que apunta a la consolidación de bares de tapas o de tapeo en todo el mundo. Con ello se muestra la gastronomía propia española en muchas partes.
